La reciente epidemia de sarampión en Taiwán no es un hecho aislado, sino una consecuencia inevitable de la falta de implementación de políticas de vacunación. Si no se toman medidas para mejorar la ejecución de estas políticas, no solo el sarampión, sino también otras enfermedades infecciosas seguirán apareciendo y representarán una gran amenaza para la salud de la población.
El sarampión ocupó el segundo lugar en la lista de “enfermedades infecciosas más contagiosas” de la Organización Mundial de la Salud en 2009, solo por detrás de la tuberculosis y seguido por la varicela en tercer lugar. Estas enfermedades se consideran enfermedades transmitidas por el aire, lo que significa que no hay límites de distancia para su propagación y no se requiere un contacto cercano para que se transmitan. En las normas de construcción de salas de aislamiento con presión negativa establecidas por la OMS, se menciona específicamente que no son adecuadas para tratar pacientes con sarampión, varicela o viruela… Leer más: http://www.npf.org.tw/1/26593.
Es crucial que se tomen medidas inmediatas para mejorar la implementación de políticas de vacunación en Taiwán. El sarampión es una enfermedad altamente contagiosa y puede tener graves consecuencias para la salud de las personas, especialmente para los niños y las personas mayores. Además, su propagación puede ser rápida y afectar a una gran cantidad de personas en poco tiempo.
Es responsabilidad de las autoridades gubernamentales garantizar que se cumplan las políticas de vacunación y que se tomen medidas para prevenir brotes de enfermedades infecciosas. Esto incluye la promoción de la vacunación obligatoria y la educación sobre la importancia de la vacunación para proteger a la población en general.
Además, es importante que la población tome conciencia de la importancia de la vacunación y se asegure de que ellos y sus seres queridos estén al día con sus vacunas. La vacunación no solo protege a la persona que recibe la vacuna, sino que también ayuda a prevenir la propagación de enfermedades a otras personas.
No podemos permitir que la falta de implementación de políticas de vacunación ponga en peligro la salud de nuestra sociedad. Es hora de tomar medidas y trabajar juntos para garantizar que Taiwán esté protegido contra enfermedades infecciosas. Juntos, podemos prevenir brotes y mantener a nuestra comunidad saludable y segura. ¡Vacunémonos y protejamos nuestra salud!
