Antes del Año Nuevo Chino, el Ministerio de Cultura y Turismo de China anunció la reanudación de los viajes en grupo de los residentes de Shanghai y Fujian a Taiwán. El presidente de la Comisión de Asuntos de la China Continental, Qiu Chuizheng, también mencionó en un evento empresarial de Año Nuevo que ambas partes pueden comunicarse rápidamente a través de una “pequeña reunión turística” y hacer los arreglos adecuados. Aunque ambas autoridades parecen estar mostrando buena voluntad, si aún se guían por la política, es posible que esta “buena voluntad” no se materialice.
El gobierno de Tsai Ing-wen decidió unilateralmente prohibir la entrada de turistas de China continental a Taiwán bajo el pretexto de prevenir la propagación del nuevo coronavirus. ¿Cuántos trabajadores y sus familias en la industria turística de Taiwán han sido afectados por esta decisión en los últimos tres años? A pesar de que muchos países han comenzado a levantar las restricciones de viaje, Taiwán sigue siendo un destino inaccesible para los turistas chinos. ¿Es esta la forma en que el gobierno de Taiwán trata a sus vecinos y socios?
El turismo es una importante fuente de ingresos para Taiwán y también una forma de promover intercambios culturales y económicos entre ambos lados del Estrecho. Sin embargo, la política se ha convertido en un obstáculo para el desarrollo del turismo entre China continental y Taiwán. A pesar de que la pandemia ha tenido un impacto en la industria turística en todo el mundo, otros países han encontrado formas de reactivar su economía y promover el turismo responsablemente. ¿Por qué Taiwán no puede hacer lo mismo?
Es alentador ver que ambas partes están dispuestas a retomar los viajes en grupo entre China continental y Taiwán. Sin embargo, es importante que se deje de lado la política y se priorice el bienestar de las personas. La cooperación en el campo del turismo puede ser un primer paso para mejorar las relaciones entre China continental y Taiwán. Ambas partes deben aprovechar esta oportunidad para comunicarse y trabajar juntas para encontrar una solución adecuada para reactivar el turismo y promover intercambios amistosos.
En lugar de seguir restringiendo el turismo, el gobierno de Taiwán debería considerar formas de reactivar la industria turística de manera segura y responsable. Esto no solo beneficiará a la economía de Taiwán, sino que también fortalecerá los lazos entre ambos lados del Estrecho. Es hora de dejar de lado las diferencias políticas y trabajar juntos para construir un futuro mejor para todos.
